
Qué difícil son las decisiones, muchas veces debes decidir si pensarás con el corazón o con la razón, porque sabemos con la razón que es lo que conviene pero con el corazón lo que realmente queremos.
Podríamos barajar las opciones con el uso de la certera razón, pero elegir la que queremos y ansiamos con el corazón, un corazón informado de lo que sufrirá y con la capacidad de dejar todo atrás para volver a amar...
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